miércoles, 30 de octubre de 2013

FARMACOLOGIA EN ODONTOPEDIATRIA.


FARMACOLOGIA EN ODONTOPEDIATRIA.


El empleo inapropiado de los fármacos durante la infancia es uno de los factores conocidos que más contribuye en el problema de aparición de resistencias. La mayor parte de estos errores tienen su origen en que el profesional que ha prescrito los fármacos no ha tenido suficiente información, relativa a ese medicamento, al alcance de la mano (indicación, interacciones, contraindicaciones, dosis terapéuticas o efectos secundarios). También influye el no poder contar con información clínica sobre anteriores episodios del niño o posibles alergias, así como los resultados de pruebas analíticas que se le hayan realizado con anterioridad.



Los errores en la dosificación y administración de los fármacos, que se producen en adultos, se pueden multiplicar por tres o seis veces en el caso de los pacientes pediátricos.

Es importante que el odontopediatra ajuste la dosis a la edad y características fisiopatológicas del niño; como también lo es, que conozca la farmacocinética y de la farmacodinamica de los medicamentos en el niño, que no son ni mucho menos superponibles al adulto y que, dentro de la población pediátrica, son, a su vez, diferentes en función de la edad del paciente y del grado de maduración de sus órganos y sistemas.

En referencia a la farmacocinética, debemos conocer que la absorción de los fármacos administrados en niños puede ser muy variable dependiendo del pH gástrico, la motilidad intestinal o el riego tisular. La distribución puede también diferir debido a la distinta composición orgánica, esto es, al contenido de agua y grasa. y su eliminación se encuentra condicionada por el grado de madurez hepática y renal de cada paciente pediátrico, entre otros factores.
Antes de indicar un medicamento debemos evaluar una serie de aspectos como son:
1.     La farmacocinética, que va a ser distinta en el niño que en el adulto
Por ej: la absorción, va a ser menor en el niño, por que en general los pacientes niños principalmente los lactantes tienen un tránsito intestinal mayor, es decir, defecan mas, por esta razón absorben menos los medicamentos. (especialmente los lactantes)
2.    La distribución, también es distinta en niños que en adultos, en porcentaje el niño posee mayor cantidad de agua que el adulto, especialmente el lactante, que tiene alrededor de un 80% de agua, por lo tanto los medicamentos también se distribuyen en forma distinta en el niño que en el adulto.
3.    La biotransformación, es menor debido a que todo el sistema enzimático a nivel del higado está inmaduro, especialmente en los lactantes, lo que hace que los medicamentos funcionen y tengan un mecanismo distinto.
4.    La excreción, también se ve retardada especialmente por una inmadurez renal  principalmente en lactantes.
También debemos considerar las vías de administración

Al elegir un medicamento en el paciente niño debemos considerar:

·         Que se encuentre en dosis pediatrica (no todos los medicamentos se encuentran en dosis pediatica)
·         Escoger aquellas vías que sean mas factibles o mas fáciles de medicar con un niño: actualmente los comprimidos no son fáciles de administrar especialmente en un niño muy pequeño, en el cual vamos a preferir el uso de gotas, supositorios ,jarabes, suspenciones etc.
·         Características del paciente individual
Considerar: la edad, el peso, masa corporal.
·         Si presenta alguna patología o enfermedad de base que pueda interferir con algún medicamento
·         Si el paciente está ingiriendo algún  otro medicamento.
·         Tambien debemos considerar que este es un paciente que esta en crecimiento y desarrollo, por lo tanto van a haber algunos medicamentos que pueden alterar estos factores. Conocido por ej. Es el efecto que produce la tetraciclina , a nivel dentario y a nivel óseo, o por ejemplo tratamientos de  corticoides que tambien pueden alterar el desarrollo de éste paciente.
·         Por último debemos considerar la compra del medicamento, lo cual va a tomar importancia de acuerdo al nivel socioeconómico en que estemos trabajando, va a ser un parámetro a considerar al indicar un medicamento.
DOSIFICACION.
La dosificación de los fármacos en la infancia se puede realizar de dos maneras:

A. Mediante una tabla que relaciona la edad del niños con la dosis de adulto.


EDAD
DOSIS ADULTA
6 meses
1/5
1 año
1/4
3 años
1/3
7,5 años
1/2
12 años
1


B. Ajustando la dosis del medicamento por kilogramo de peso del niño.
Debemos dosificar siempre en unidades como mililitros, centímetros cúbicos o gotas. Las equivalencias con las cucharadas son:

Cucharada sopera = 7,5 centímetros cúbicos (cc)
Cucharada de café = 5 centímetros cúbicos (cc)
Cucharada de moka = 3 centímetros cúbicos (cc)





Edad

Peso (Kg.)

Superficie corporal (m2)

% de la dosis del adulto

4 SEMANAS
2 MESES
4 MESES
1 AÑO
3 AÑOS
7 AÑOS
12 AÑOS

3,5
4.5
6,5
10
15
23
40

0,21
0,28
0,36
0,49
0,65
0,87
1,27

12,5
15
20
25
33
50
75
TABLA I.- RELACIÓN ENTRE EDAD-PESO-SUPERFICIE CORPORAL (m2)-PORCENTAJE DE DOSIS EMPLEADA EN ADULTOS

No existen reglas fijas para el cálculo de la dosis óptima de un medicamento determinado para su utilización en niños. Las múltiples aproximaciones que se han descrito, hasta la fecha, revelan la complejidad real de este problema. La utilización de la edad del niño como guía para el ajuste de la dosis puede provocar errores graves al no tener en cuenta las amplias variaciones de peso de los niños de un mismo grupo de edad.

Tampoco el ajuste de la dosis basado exclusivamente en el peso del niño parece una aproximación adecuada, ya que aplicando una de las fórmulas habituales [Dosis pediátrica = Dosis adulto X (Peso niño/Peso adulto)] es bastante frecuente que se obtengan dosis inferiores a las teóricamente eficaces.

La aplicación del cálculo de la dosis según la superficie corporal, en metros cuadrados, probablemente proporcione una mejor estimación de la dosis de un fármaco apropiada para un niño. Los argumentos a favor de este método de cálculo se basan en la relación entre la superficie corporal y varios parámetros fisiológicos como el gasto cardíaco, el volumen sanguíneo, el volumen extracelular, la función respiratoria, el flujo renal y la filtración glomerular, que pueden tener una estrecha relación con el metabolismo y la excreción de fármacos.

Según esta regla, y teniendo en cuenta que la superficie corporal es proporcionalmente mayor que el peso cuanto menor tamaño presenta el sujeto, las dosis calculadas mediante este método serán proporcionalmente mayores que las calculadas únicamente en función del peso corporal:

Dosis pediátrica = (Sup.corporal (m2)/1,8) x Dosis adulto

A medida que el niño crece, aumenta el peso y la superficie corporal, si bien este último parámetro antropométrico aumenta en menor proporción. La superficie corporal puede obtenerse a partir de nomogramas que se utilizan para el cálculo el peso y la talla del niño. En ausencia de estos nomogramas puede utilizarse una aproximación basada en el cálculo de la dosis según la fórmula anterior con la introducción de un factor de poderación:

Dosis pediátrica = Dosis adulto x (Peso niño/Peso adulto) x 0,7

La experiencia clínica con la mayoría de los fármacos parece indicar que la dosificación según la superficie corporal resulta más adecuada que la basada en otras estimaciones.

ERRORES DE DOSIFICACION Y ADMINISTRACION.

Los errores más frecuentemente referidos son:

  1. Extrapolar datos confirmados para el paciente adulto al pediátrico.
  2. Carencia de material apropiado para medir la dosis prescrita.
  3. Falta de presentaciones farmacéuticas adecuadas para facilitar la dosificación o administración del fármaco al    paciente pediátrico.
  4. Confusión en las unidades de medida al prescribir, preparar o administrar los fármacos heróicos. Por ejemplo, microgramos (mcg.) por miligramos (mg.).
  5. Errores de cálculo o de transcripción de los datos.
  6. Utilización de cucharas o cucharillas de café como unidades de medida: el volumen puede variar el cien por cien de un tipo a otro de cubertería.
  7. Superar la dosis máxima del adulto. Es frecuente en adolescentes obesos por el hábito de calcular la dosis por kilo de peso y día.
  8. Omisión de la dosis que coincide con el horario escolar o nocturno.
  9. En los procesos crónicos, administración de fármacos caducados o mal conservados.
USO Y ABUSO DE FARMACOS EN PEDIATRIA.

El concepto fármaco igual a un artículo de consumo, como algo que puede tomarse o dejarse de tomar, está íntimamente relacionado con su dispensación fuera de las farmacias y su promoción en los medios de comunicación, ignorando en muchas ocasiones los riesgos que conlleva toda terapia, incluso la controlada. España se encuentra entre los países con mayor automedicación con antibióticos.

Nuestra labor como profesionales de la salud que tratamos enfermedades orales con repercusiones sistémicas y ayudamos a prevenirlas, consta de una tríada terapéutica: Información, Consejo terapéutico y Educación. Aplicar en nuestra práctica diaria estos tres elementos del acto médico conllevará una visión global imprescindible al acto de prescribir fármacos.

  1. Información. Si a cualquier persona se le explica por qué y para qué se le receta o no un medicamento comprenderá y aceptará de mejor grado las decisiones que se tomen. El conocimiento básico, con lenguaje inteligible para los pacientes, de la enfermedad que vamos a tratar ayuda a comprender el manejo de la misma.
  2. Consejo terapéutico. El incumplimiento terapéutico es un grave problema en tratamientos agudos y crónicos y refleja un planteamiento incompleto o mal comprendido de los objetivos que tiene cualquier tratamiento. Si el paciente no está informado, difícilmente conseguiremos un uso adecuado de los fármacos. Si, al mismo tiempo, explicamos las condiciones de uso y limitaciones de los fármacos administrados: dosis, frecuencia de las dosis, tiempo de tratamiento, condiciones de toma, etc... estaremos dibujando el perfil correcto para el uso de este fármaco en las condiciones presentes y futuras. Solamente mediante pacientes convencidos e informados conseguiremos disminuir una automedicación desordenada y errónea, así como el incumplimiento terapéutico.
  3. Educación. Una gran parte de los usos erróneos de la automedicación han surgido del modelo médico del que han aprendido. Los profesionales de la salud somos el modelo educativo sanitario para nuestros pacientes. Mantener una actitud rigurosa en nuestra labor es una buena manera de definir las condiciones de uso de los fármacos. Con una actitud educativa habitual incidiremos sobre amplios grupos de población que podrán influir directamente sobre su entorno familiar y de amistades. Este aspecto es de la mayor importancia en la automedicación de los niños por parte de sus padres o cuidadores.
Cuando se incluye como incumplimiento desde un olvido puntual hasta un abandono total del tratamiento, las cifras llegan a alcanzar el 66% para cualquier población occidental. De todas ellas las más comunes son:

-          Disminución de la dosis por iniciativa propia del paciente.
-          Reducción de la duración por iniciativa propia del paciente.
-          Adaptación del horario a conveniencia del consumidor.
-          Disminución de la frecuencia de administración.

Bibliografía

secretaria@odontologiapediatrica.com . 2008. http://www.odontologiapediatrica.com/farmacologia.


2 comentarios:

  1. La aplicación de los medicamentos en odontología se está volviendo un verdadero desafío ya que la mayoría de los pacientes no se toman el medicamento de la manera indicada si no que se la toman cuando les duele o cuando se acuerda, por lo que los pacientes se están volviendo resistentes a algunos tipos de medicamentos.

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  2. Me parece un tema muy interesante, me ayudo a despejar muchas dudas.Felicitaciones

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